el tema de la corrupción regresa como un boomerang al seno mismo del Gobierno de Evo. podíamos emprezar con los tres grandes fracasos: Mutún, Misicuni, Karachipampa. el primero se termina al no disponer el Gobierno Masista del combustible para explotar el mayor yacimiento de acero situado en territorio boliviano. El Mutún se convierte en el primer gran fracaso en la tan cacareada "industrialización" que no se da, no obstante los ingentes ingresos, verdaderamente extraordinario de los últimos diez años por los altos precios del gas natural y de los minerales. la empresa hindú que se adjudicó la obra, es obligada a dejar sus tareas, el Gobierno la despide en los hechos y los empresarios inician un juicio por muchos millones de dólares como indemnización.
el segundo fracaso se llama Misicuni. en la última gestión cuyo alto responsable es Alvarado de plena confianza de Morales, se esfuman 23 millones de dólares que simplemente "se hacen humo" no obstante una "tibia y temblorosa acción de la Contraloría" el dinero se ha esfumado y no aparece. el manejo ha sido turbio, engorroso, mañoso como han calificado algunos patriotas cochabambinos que estuvieron viendo la documentación. el avanze del proyecto ha sido tan insignificante, que no justifica la cuantiosa inversión. el Gobierno Prefectural no ha sido capaz de señalar el detalle desde el reinicio de obras a cargo de una empresa china. la ciudadanía es presa de una gran decepción, puesto que el proyecto de largo alcanze para proveer a Cochabamba de agua potable, de agua de riego, de energía sigue siendo "una eterna esperanza".
Karachipampa fue objeto de un show, de una teatralización para la publicidad cuando el Ministro Navarro tomó la posta, trajeron lingotes de plata fundidos en México y los hicieron pasar como propios ante autoridades y prensa. descubierto el engaño, se repitió el "cuento del tio", que los hornos de la fundidora de metales, no habían podido ser rehabilitados y que los repuestos solicitados en Alemania tardarían más de un año en llegar a Potosí. (?)
a los hechos mencionados, se suma los últimos días, las denuncias de organizaciones campesinas de haberse "echado mano al Fondo Indígena" en cuya caja faltan al menos 74 millones de bolivianos, sin tomar en cuenta los muchos millones empleados en proyectos que no funcionan, que no están terminados o que se quedaron a medias por falta de recursos. la legalmente responsable del FONDO, la bartolina Nemesia Achacollo, en el colmo de la dejadez había afirmado, "en efecto soy presidenta del Directorio del Fondo", pero no tengo nada que ver con el movimiento financiero. en suma conducta típica en el masismo "yo no tengo la culpa. el culpable es el otro". corrupción que es común a los gobiernos del ALBA que hoy mismo están en graves problemas en Argentina, en Venezuela, y aún en Chile, donde un hijo de Bachelet acaba de renunciar a su cargo público para ser investigado por abuso de poder...así sucede con esos gobiernos que no quieren dejar el poder.
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