En un comunicado, ese cuerpo policial precisó hoy que la detención del boliviano D.G.R., de 22 años, se produjo el pasado lunes, cuando una maleta fue "rechazada y marcada por Jimy, un perro especializado en la detección de sustancias estupefacientes".
"Con los datos que figuraban en la maleta se puso en marcha el dispositivo para localizar a su propietario, D.G.R., boliviano de 22 años, que se encontraba en la puerta de embarque de un vuelo a Barcelona", en el noreste de España, explicó la nota.
Con la ayuda del buen olfato de Jimy, los agentes hallaron tres paquetes que contenían alfajores con cocaína que tenían un peso total de 6,152 kilos.
El mismo lunes, la Guardia Civil detuvo también en el aeropuerto madrileño al panameño C.V.P, de 61 años, al comprobar que, a la llegada de un vuelo procedente de Santo Domingo, llevaba en las "barras metálicas" de la maleta 1,3 kilos de cocaína.
También en un vuelo procedente de la capital dominicana llegó el español R.F.V., de 44 años, con 12 paquetes que contenían 3,12 kilos de cocaína, por lo que fue detenido y no pudo continuar su viaje previsto con final en Granada (sur de España).
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