La Aduana dice tener datos muy precisos sobre los autos “chutos”. Asegura que son más de 33 mil vehículos indocumentados en todo el país y que la mayoría se encuentra en el Chapare, donde cada vez suena con más insistencia el pedido de legalización. Pese a ello, la presidente de la Aduana en persona, Marlene Ardaya, salió ayer a comandar un operativo de control en la ciudad de La Paz, para detectar placas de automóviles con placas clonadas, intervención que se replicó en Cochabamba y Santa Cruz.
En el trópico cochabambino, donde hace poco fue removido un jefe policial que protegía a los “chuteros” no se hizo nada. En pocas horas, la Aduana logró detectar decenas de autos ilegales, entre ellos un costoso modelo de la marca BMW que circulaba en Santa Cruz con una placa falsa.
En reiteradas ocasiones la señora Ardaya ha dicho que el problema del contrabando tiene muchas implicancias sociales, argumento que también usan los defensores de los “chutos”, quienes afirman que la pobreza los obliga a incumplir la ley. El Gobierno asegura que no va a decretar amnistía, pero está haciendo algo tan polémico, que nadie es capaz de notar la diferencia entre lo legal y lo ilegal.
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