La detención de Gabriela Zapata Montaño, la figura que marcó las tendencias en el referéndum del 21 de febrero, ha causado polémica y tal vez se convierta en la protagonista del futuro del “proceso de cambio”.
El arresto de la “dama de azul” fue una decisión del Ministerio de Gobierno y el propio ministro, Carlos Romero, ha admitido que procedió sin la necesidad de una orden de apremio emitida por la Fiscalía, cuyo titular, Ramiro Guerrero observó ese detalle, desvinculándose de la aprehensión de quien fue la pareja del presidente Morales y a quien se acusa de tráfico de influencias y ganancias ilícitas.
Romero argumenta que tomó la determinación ante el peligro de fuga de Zapata y la inminente denuncia que supuestamente estaba preparando contra ella el Ministerio de Transparencia y lucha contra la Corrupción. Seguramente esta acción causará revuelo dentro del entorno que rodea al primer mandatario, quien hace unos días habló del peligro de división interna en el MAS.
Por ese riesgo, dijo el jefe de Estado, se habría tomado la decisión de postergar el debate acerca del candidato que tomará su lugar en las elecciones del 2019. Al parecer hay algunos que no están de acuerdo con esperar tanto y quieren ya mismo dividir las aguas entre los que quieren y los que se niegan a luchar contra la corrupción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario