Expertos en tortura física y psicológica asesoran en creación de CIA gubernamental
El ministro San Miguel es el coordinador del plan.
Eduardo Galeano decía desconfiar profundamente de los conversos, de aquellas personas que asumen su nueva fe con un fanatismo extremo que los lleva a actuar en forma despiadada contra sus antiguos compañeros o correligionarios. Afirma que esta actitud es una forma por demás torpe de demostrar que se ha asumido a plenitud la nueva fe y que se ha desechado por completo su antigua ideología.
Lamentablemente se trata de especímenes cada vez más frecuentes y no es raro ver a antiguos neoliberales haciendo ahora alarde de sus recientemente adquiridas convicciones “izquierdistas”. En el pasado existieron otros que por puro interés personal transitaron en sentido exactamente contrario. Unos y otros son igualmente despreciables.
¿Pero a que viene toda esta apelación a que la militancia tenga un sentido ético? Ocurre que la tipificación de “converso” se adecua perfectamente al ministro de Defensa, Walker San Miguel. Militante movimientista, asumió con encomiable entusiasmo la defensa de las empresas capitalizadas y jamás se le oyó decir ni pio sobre los luctuosos hechos de octubre de 2003.
Sin embargo, luego de un curioso proceso de transformación devino en indígeno- izquierdista y ahora se muestra implacable contra sus antiguos compañeros de ruta contra quienes ejerce una sistemática represión que promete ser más dura aún, en franca competencia con la que ejercitan sus colegas de gabinete, Juan Ramón Quintana y Alfredo Rada.
Ese es precisamente el punto. Sucede que el converso San Miguel ha anunciado que se creará un organismo de “inteligencia” (léase de represión y persecución) conjunto entre la Policía y las FFAA y que para ello se acudirá a expertos franceses.
El presidente Evo Morales dice continuamente no tener miedo pero los ciudadanos de a pie si debemos tenerlo ante un anuncio de este tipo. Sucede que los expertos franceses son los maestros en el “arte” (de alguna manera hay que llamarla) de la tortura.
Hicieron su primeros pininos en Indochina y particularmente en Argelia. La doctrina de estos “expertos” se basa en el uso sistemático e intensivo de la tortura para obtener información de los opositores. Este criterio lo transmitieron a organismos como la CIA y tuvo una aplicación práctica en Sudamérica durante las dictaduras militares con las consecuencias que ya conocemos.
Por tanto el anuncio del ministro San Miguel no significa otra cosa que el gobierno del MAS que se ufana de su indigenismo e izquierdismo usará métodos característicos de gobiernos de ultra derecha ( la unidad de los contrarios es uno de los conceptos de la dialéctica marxista) y de hecho ya lo está haciendo.
Pero hay algo que San Miguel, seguramente alumno reprobado en historia, no sabe. Que ni la represión ni la acción ya sea sutil o brutal de organismos de “inteligencia” puede mantener eternamente sojuzgado a un pueblo ni confinadas sus conciencias. Eso es algo que podrán contárselo los “expertos” franceses a la luz de sus experiencias en Viet Nam y Argelia.
(Texto de Palo Santo. Fuente sitio de Ernestro Justiniano, Santa Cruz, Bolivia)
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