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viernes, 31 de octubre de 2008

cuando paulovich descubre que casi todos se estornudan en la justicia. dixit les importa un rábano.

Viejos pueblos civilizados hicieron de la Justicia una diosa a la que llamaron Temis, a la que vistieron con una túnica impoluta, le vendaron los ojos y la hicieron portar una balanza. Algunos hombres y mujeres de mi tribu la convirtieron en una birlocha fané y descangayada con una percha en el descote a quien insultaron y la llamaron pesetera.La otra tarde visitaba el barrio de San Pedro en compañía de mi comadre Macacha a quien invité unos helados de canela que aún conservan el mismo sabor que deleitó a mis años infantiles en la “plaza de los carpinchos”, en la cual seguimos evocando a los hermanos Palazuelos, a la pléyade deportiva del Club Olimpic y del Club Atlético La Paz.De pronto sentimos el vocerío de una multitud apostada en las puertas de la cárcel de San Pedro siendo absorbidos por aquélla al tratar de saber o conocer los motivos de sus airadas voces que sirven para cualquier manifestación pública: “¿Qué queremos? Justicia. ¿Cuándo? Ahora. ¿Cuándo carajo? ¡Ahora carajo!Cuando escuché decir que pedían Justicia, saqué de mi cartera una fotografía del monumento a la diosa Temis que está colocada encima de la escalinata del Palacio de Justicia de la ciudad de La Paz, más conocido por nosotros los cholos como “los tribunales”.Entregué la fotografía de la escultura a Macacha y ella les dijo a los enfurecidos manifestantes: “aquí está la foto de Temis, la diosa de la Justicia y la Moralidad”, pero la masa no la entendió y continuó vociferando.Cuando esas personas callaron por algunos instantes, les pregunté quiénes eran, de dónde venían y qué exigían al cercar la cárcel. Eran los sectores sociales del Movimiento al Socialismo (los SS), venían de la ciudad de El Alto y vociferaban contra la Corte Suprema de Justicia que se había pronunciado en favor de una demanda del señor Leopoldo Fernández, ex-prefecto de Pando, actualmente preso en la cárcel de San Pedro.Dije a Macacha: “Si estos SS no reconocen una decisión de la Corte Suprema de Justicia en favor del señor Fernández, consultemos con el viceministro de Justicia, respondiéndome Macacha: “También los dirigentes del gobierno y del MAS desconocen a la Corte Suprema de Justicia”.Entonces la vocinglería fue mayor y todos a uno me gritaron en la oreja y en la de mi comadre: “Nos estornudamos en la Corte Suprema de Justicia y también en la Justicia!”Entonces, en medio de la tribu, sintiéndome parte de ella, bailé la danza de la muerte como un negro cualquiera y rompí en cien pedazos la fotografía de la escultura de la diosa de la Justicia Temis y dancé en homenaje de la diosa insultada, humillada y ofendida.

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