En días pasados el señor Andrés Gómez Vela Director de Radio Erbol, presentó una petición moral ante los magistrados que tienen a su cargo la administración de justicia, por la cual, solicitó su renuncia demostrando con suficiencia actos jurídicos y personales que violaron la ley y torcieron la justicia.
Me allano plenamente a este pedido por ser una de las víctimas de la justicia amañada, manoseada y supeditada a la voluntad del poder Ejecutivo desde hace ocho años. En efecto, la conducta venal que practican actualmente los Magistrados, no es nueva, responde a una vieja práctica que usaron todos los gobiernos para hacer prevalecer sus intereses.
Precisamente por ello es que se ofertó al pueblo una nueva manera de elegirlos, y se dispusieron elecciones que tuvieran el encanto de elegirlos por el voto popular para que esa elección los liberara del control político y económico del Poder Ejecutivo, esa fue la idea central en la Constitución Política Plurinacional.
Durante el debate que se produjo con este fin faltaron horas para denunciar la forma y conductas ilegales, injustas y venales que usaron los jueces y Magistrados para administrar la justicia, se dijo que el neoliberalismo había cuoteado esos cargos con el fin de controlarlos y obligarlos a dictar sentencias a su favor. Todo lo actuado desde la fundación de la República en 1825 hasta ese momento estuvo constituido por un mecanismo perverso que terminó por generar un dicho “cuídate de la justicia boliviana” ante esto es que Evo Morales y el MAS pidieron hacer las cosas de diferente manera.
Evo Morales ha querido mostrarse permanentemente como el ejemplo del cambio y dice a los cuatro vientos que está haciendo las cosas de manera distinta a las que se hacía. Sin embargo él mismo, termina reconociendo que la justicia está podrida. Es decir los jueces que él eligió a los cuales les dieron el cargo para que cumplieran con sus instrucciones, hacen lo mismo que sus predecesores.
Y el señor Gómez Vela demuestra casos concretos en los cuales hubo conducta indebida de los Magistrados y no pasó nada. Entiendo que Evo Morales conoce estos asuntos y actúa con complicidad y usa de ellos para sacarle provecho a su apetito inconmensurable de poder. El magistrado de apellido Cusi denunció el voto venal de Tribunal Constitucional para legalizar la nueva reelección del actual Presidente.
La Corte Suprema de Justicia que llevó el juicio de responsabilidades contra Gonzalo Sánchez de Lozada y en mi contra como Ministro de Servicios Financieros, dictó sentencia acusatoria contra Erick Reyes Villa y Adalberto Kuajara, no lo hizo en contra mía porque decidí buscar refugio ante lo inevitable: ser acusado de complicidad con el supuesto genocidio y asesinato de ciudadanos bolivianos. No sé las razones para que esos dos ex ministros hayan decidido aceptar esta sentencia a pesar de ser inocentes, pero yo nunca le haría el juego a la injusticia, y nunca aceptaré que se me acuse y sentencie por lo que no hice. Por eso soy refugiado. No le temo a un juicio imparcial, manejado por jueces probos, porque sé que mis pruebas demuestran mi inocencia, les temo a esos jueces venales que maneja el gobierno de Evo Morales, que me negaron el debido proceso y que me avisaron de la sentencia condenatoria ocho meses antes de que la dictaran al negar la extinción del proceso.
Me allano pues a lo pedido por el señor Gómez Vela, y añado que no solo deben renunciar por dignidad estos Magistrados sino que todos los juicios, por causas políticas, en los que han intervenido Magistrados durante el actual gobierno, sean objeto de una revisión por un Tribunal de Excepción nombrado por dos tercios de la Asamblea Legislativa Nacional o sean remitidos a un Tribunal Internacional donde podamos acudir con la confianza de tener un proceso legal transparente y justo.
El que tenga oídos para oír que oiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario